El río como símbolo onírico, representa el devenir de la vida. De donde venimos y hacia donde vamos.
Así pues, si vemos durante el sueño un río que discurre tranquilo, y el paisaje que lo rodease ve bonito y fecundo, es signo de tranquilidad personal, y además de buen momento de dinero.
Si por el contrario, en nuestro sueño el río discurre con aguas violentas, o incluso se desborda, es señal de que debemos buscar la estabilidad, sobre todo metal, ya que vivimos una existencia llena de negatividad, lo cual puede traernos pesares y desgracias. Este sueño también nos invita a replantearnos ciertas amistades, que en realidad no nos convienen.
Es importante al soñar con un río, que nos fijemos en el estado de su agua.
Soñar con un río de aguas cristalinas, es símbolo inequívoco de felicidad. Cuanto más limpias estén las aguas, mayor será nuestra dicha.
Al contrario de lo anterior, soñar con un río de aguas turbias, o lodosas, o que contiene mucho barro, es símbolo de tristeza, e incluso de depresión. si este es nuestro caso, debemos buscar ayuda para salir de dicha situación.
Si recorremos un río en una balsa, o en cualquier otra embarcación, y no tenemos ningún percance, significa que estamos encauzando bien nuestra vida. este sueño denota valores firmes en el soñante.
Si en sueños recorremos el río y nuestra embarcación sufre riesgo de zozobrar, o incluso de naufragar, es señal de que de no cambiar radicalmente de estilo de vida, corremos el riesgo de sufrir serios reveses y desgracias que nos sumirán en la tristeza.
Observar en el mundo onírico un río desde la orilla, sin atrevernos a cruzarlo, o a navegarlo, es señal de que debemos vivir con más arrojo y valentía, y encarar los proyectos con confianza en nosotros mismos.
Ver a una persona del sexo opuesto en una orilla del río, es símbolo inequívoco de enamoramiento, o al menos de amistad sincera.
Entradas Relacionadas: