La monja en el estado onírico, es un símbolo ancestral de sabiduría y espiritualidad. Al igual que el monje y el sacerdote representa nuestra fe y nuestra moral, y en que estado se encuentran.
También la monja en sueños, refleja necesidad de consejo. Buscamos a alguien que nos asesore, sobre cierto asunto, o cuestión que nos preocupa.
Si durante el sueño vemos a una monja vestida de blanco, significa que recibiremos la ayuda y el apoyo que necesitamos. Seremos aconsejados acertadamente, lo cual nos beneficiará a la hora de cumplir nuestras ideas y proyectos.
Ver en sueños a una monja vestida de negro, es símbolo de que aunque nos prestarán el consejo que necesitamos, nos será complicado llevar nuestras metas a buen puerto en el tiempo previsto.
Soñar con una monja rezando, en una iglesia, o en el monasterio, es signo de que cumpliremos aquello que hondamente deseamos, incluso con éxito y honores.
Si durante el sueño, somos nosotros la monja, significa que dentro de poco alguien nos pedirá consejo y debemos ayudar a dicha persona sabiamente, en todo lo que podamos.
Ser monja en el mundo onírico y portar una cruz, o un rosario, es símbolo de que debemos recuperar valores perdidos, para conseguir la superación personal.
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