Soñar que nos bañamos en aguas limpias y no ocurre nada malo durante el sueño, es señal de que estamos avanzando correctamente en el plano espiritual. Además este sueño denota que nuestras relaciones son armoniosas, y que las personas de nuestro entorno nos guardan un cariño sincero.
Si mientras soñamos que nos bañamos el agua está turbia, muy fría, o demasiado caliente, es indicio de que nuestra salud no pasa por su mejor momento. Debemos cuidarnos más, ya que podríamos estar incubando algún tipo de virus, o enfermedad, aunque esta no tiene porque ser de gravedad.
Si el baño con el que soñamos es agradable, es señal de que después de muchos baches conseguiremos nuestros objetivos. Nuestro esfuerzo y nuestros desvelos muy pronto se verán recompensados, incluso más de lo que pensábamos en un principio.
Si el baño en el estado onírico nos resulta desagradable, o vemos una bañera vacía, significará lo contrario, o sea, que tendremos que luchar contra algunos problemas de complicada solución. Quizás lo más recomendable es que busquemos nuevos objetivos, si los actuales, ya sean personales, o profesionales, se complican demasiado.
Soñar que nos bañamos vestidos, es señal de enfermedad, y en alguna ocasión es sinónimo de luto, aunque esto ocurre en contadas ocasiones.
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