Las serpientes en el mundo onírico, están en la mayoría de las ocasiones relacionadas con rivales, o enemigos que tenemos en la vida real.
Soñar con que vemos repentinamente una serpiente, es señal de que habrá un ataque por parte de nuestros enemigos. Si la serpiente nos muerde, es signo de que dicho ataque nos hará daño, y deberemos tomar todas las medidas a nuestro alcance para neutralizarlo.
Andar tranquilamente entre serpientes en el estado onírico, es de buen agüero. Significa que lograremos el éxito en aquello que nos proponemos, y nuestros enemigos nada podrán en contra nuestra.
Si al andar entre serpientes sentimos miedo, es señal de que en vigilia nos aterroriza sufrir un ataque por parte de nuestros rivales, lo cual nos hace más vulnerables.
Ver serpientes en nuestra cama, aunque pueda parecer negativo, es un buen augurio. Tendremos suerte en nuestras metas y proyectos, sobre todo laborales, o afectivos.
Matar a una serpiente en el estado onírico, es un excelente augurio. Significa que lograremos alejar de nuestra vida a personas afectas a los chismes, y a nuestros enemigos. La toxicidad que respiramos muy pronto terminará y todo volverá a fluir positivamente.
Ahuyentar serpientes en sueños, es también símbolo de alejamiento de personas tóxicas, pero en este caso se deja una puerta abierta, a que en un futuro vuelvan a aparecer en nuestra vida.
Soñar con serpientes es también símbolo de hipocresía, y de engaño. Debemos saber captar estos comportamientos, y alejarnos de ciertas personas negativas que hay en nuestro entorno, si no queremos acabar cayendo en su trampa.
Soñar con una serpiente que muda de piel, es símbolo de cambios profundos en la vida del soñante, los cuales no tienen porqué ser negativos. Se presentarán oportunidades para mejorar, y debemos actuar con astucia y aprovecharlas.
El resto de detalles del sueño, nos darán las claves para interpretarlo completamente.
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