Los nabos en el estado onírico, tienen una simbología normalmente positiva.
Si soñamos con que estamos cocinando nabos, y nos queda un plato apetitoso, es señal de que cumpliremos exitosamente nuestras metas y veremos nuestros proyectos correctamente completados.
Si durante el sueño comemos nabos, es signo de que viviremos dentro de poco una mejora en nuestra economía. El dinero no será un problema y podremos vivir con más desahogo.
Los nabos en sueños, también auguran buena fortuna en el amor. La persona a la que amamos, pronto caerá en nuestras redes, o bien encontraremos a alguien nuevo en nuestra vida, con quien nos complementaremos a la perfección.
Ver en el mundo onírico nabos en exposición, y no poder alcanzarlos, es signo de que nos será complicado lograr nuestras metas laborales, o afectivas.
Si durante el sueño vemos nabos, y no los deseamos, es señal de que somos personas humildes y no buscamos el éxito a cualquier precio.
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